lunes, 14 de julio de 2008

¿Los argentinos tenemos un carácter de mierda?

Situación: haciendo las compras en la tiendita de la esquina (acá se le dice así a algo así como un "mercadito de barrio")

Yo: ¿Tenés limones?
Un adolescente niño me mira sin haber comprendido una palabra, no dice nada, solo me mira intentando recibir una señal. Yo insisto, con esfuerzo.
Yo: Limones, LI - MO- NES.
Un muchacho (este sí) más adulto, más grande de tamaño y de edad, desde atrás, sentado, contesta.
Muchacho adulto: No
Yo: ¿Y no tenés jugo V8?
El adolescente hace excatamente lo mismo: Me mira, intenta recibir una aclaración -no la recibe-, me mira sin haber comprendido una sola palabra de lo que dije. Esta vez se impacienta a ver mi cara "impacientada". Yo insisto (otra no me queda).
Yo: Jugo V 8. De ocho verduras.
El adolescente sigue igual, atrás suyo, el adulto, sigue igual. Yo, no. Y ahí me mando un exhabrupto.
Yo: ¿Hablo castellano?
En ese momento se para el adulto, empuja al adolescente y se digna a atenderme un poco más dignamente: me enseña el jugo, me lo da, me pregunta si quiero algo más. Yo pido disculpas por mi falta de paciencia: para mi sorpresa, a nadie le importa. Qué bueno. Qué alivio.


2 comentarios:

Mercadito de barrio dijo...

v8! aca no lo venden más! ojalá vuelva!!!!

basta de azul dijo...

Que hermoso guion!