viernes, 27 de junio de 2008

Mi abuela, la inmortal

Falleció mi abuela. Tenía 90 años ¡90 años! Pero yo creía que iba a ser inmortal. De verdad pensaba que eso de morirse no era para mi abuela... Ella, que se quería morir desde que la conocí, que sufría por enfermedaes malditas que nada parecían hacerle, ella, que cuando no aguantaba más rogaba morirse... Pero era más fuerte que un ejército de leones: mi abuela vivió sus últimos ¡16 años! sin intestino delgado. En 1992 le hicieron una intervención quirúrgica complejísima y peligrosa que la sometió a 7 horas de anestesia... Muchos pensaban que ahí se quedaba. Pero no. Mi abuela a las semanas en un asado familiar me pedía que le pasara por debajo de la mesa chorizos para comérselos a escondidas (¿Quién pude vivir sin un choripan?) porque claro, los tenía requete prohibidos. Y ni hablar las tortas de chocolate, que comía con tanto placer. A mi abuela NADA le afectaba. Sólo su vida. Ella sufría mucho. Y se lamentaba. Y lloraba. Y le encantaba conversar. Y hablar de su marido, el gran amor de su vida. Me contaron que la velaron en su casa, como ella quería. Que la vistieron muy linda: la maquillaron y le pusieron grandes aros, como a ella le gustaba. Mi abuela era muy coqueta. Se pasaba el spray en el pelo con las dos manos porque con una sola no podía. Ella decía que no tenía fuerza. Y yo pensaba que ella era la mujer más fuerte que jamás había conocido.
Hace diez años en una navidad me regaló un anillo de platino con una perla cultivada porque ella decía que se iba a morir pronto y quería dejar su herencia en vida. Yo no le creí. Mi abuela no estaba hecha para morirse. Eso era para gente normal, no para ella.
La enterraron al lado de su amor. Como ella quería. Ahora descansa tranquila. Ya no sufre más.

8 comentarios:

Vivian dijo...

Me hiciste llorar, tarada!!

Chechula dijo...

y bueno, es así...
vos también me hiciste piantar más de lagrimón!

Marilda dijo...

Qué lindas palabras! Es cierto eso: yo también pensaba que la abuela era inmortal.

Margot dijo...

querida, me quedé sin palabras. siempre me acuerdo de las anécdotas que contabas de tu abuela. hermosas palabras. y vivos recuerdos! por eso es uno inmortal: por los recuerdos que deja en los otros!
te quiero mucho, querida.
Solci.

Chechula dijo...

abrazos para mer y margot...

Vivian dijo...

A mí no me mandás abrazos... je

utopica51 dijo...

Muy hermoso lo que escribiste, LLamae por teléfono,que nunca te encuentro en casa.Te extrañamos.

basta de azul dijo...

2 cosas me enseno a mi la abuela de chechi:

1: Nadie puede vivir sin un choripan
2: Hay que casarse por AMOR

La recuerdo en la cocina hablandonos sabia,ente del amor

Brindo por ella!